1950 Teatro - Review
Rescatado de mi Blogger personal.
LIBROSTEATRO


Hace alrededor de un mes estaba viendo mi noticiero independiente favorito en YouTube. Usualmente, no suelo mirar todo el noticiero, en especial suelo omitir la sección de amenidades, salvo los lunes (que recomiendan libros). Fue en una de esas secciones de amenidades que escuche de 1950, una obra de teatro que iba a realizarse en mi ciudad.
Resultaba que esa semana el viernes iba a salir de vacaciones, así que para inaugurarlas pensé que sería cookie y una manera de salir de la zona de confort ir a verla.
La historia trataba de la rebelión de estudiantes del colegio Independencia en Arequipa, y como hizo levantar a todo el sur en contra de los maltratos de los mismos sufridos por sus profesores.
De por sí, no esperaba mucho, en realidad, quizá sea la toxicidad de mis amistades que nunca está de más la cual influyo de una u otra manera en mi prejuicio inicial. Esa toxicidad que dice en la que te dicen que todos los que salen a protestar son de izquierda, y son pro castillistas, terrucos, etc, etc. Lo cierto es que aún estaba aterrizando mi postura, y esa obra ayudo a ello.
De por sí me conmovió enormemente la humanidad que podía despertarme la misma, y la cantidad de sentimientos encontrados y culpa que podía hallar en mí.
Al finalizar la obra el director hizo unas palabras y presento a uno de los estudiantes del colegio del que trataba la obra, esa sensación de ver a una leyenda sin estampa fue indescriptible.
Desde el principio supe que tuve suerte, así de simple. Y fue así como me enamore del teatro.
Dio unas palabras de como lucharon en aquella revolución de 1950, que no hicieron más que conmoverme, quebrarme, y pensar que había tenido mucha suerte. Estaba vivo, en mi propia batalla de 2023, y ya iba varios años luchando.
Entendí varias cosas, ese orgullo abstracto de ser arequipeño, de amar la legacía, de lo que significa estar vivo, y de como llegar a rascar los bordes del universo se hacía una tarea más divertida.
Para finalizar, el escritor del guion dio unas palabras, y dijo que para quien lo quisiera el guion estaría a la venta a la salida de la obra, de cerro el telón y yo adquirí el guion casi a la par.
Y hoy empecé y termine de devorarlo. Escenas más, escenas menos, diálogos más, diálogos menos, fue interesante revivir esa sensación de estar en el teatro, pero esta vez, a través de un texto.
Y es aquí cuando pienso en lo mucho que he madurado, pero aún falta más, falta aquella barrera de identificar el punto más alto de mis ideales y perseguirlo fielmente y correctamente en busca de un mejor mañana.
Ah, sí, hice que me lo autografiara.
Ahora a estudiar, tengo una batalla que librar.